sábado, 17 de noviembre de 2012

En la cuerda floja

Hoy le toca a Jimi Hendrix acompañarme en una nueva entrada. Vamos a dejar a un lado el sentimentalismo. Toca centrarse un poco en lo que está pasando, en la actualidad.
Y que está pasando? Me resulta complicado definirlo, ya que creo que no existe una definición concreta que abarque el caos en el que estamos sumidos, en el que nos ahogamos, en el que perdemos todo lo que tenemos a nivel social. Digo a nivel social para la mayoría de las personas, por que algunas pierden algo más como...a si!como su vivienda.
Después de ver el documental Inside Job, resulta increíble ver como aquellos que gobiernan nuestras vidas, que juegan con nuestro empleo, nuestras casas,nuestras familias, nuestro futuro no dudan en admitir que sabían que en algún momento toda esa burbuja bancaria, creada para enriquecer a unos pocos, se rompería, arrastrando con todo lo que dependía de ella. La economía mundial. Esto es sorprendente y nos indigna, obviamente, pero más sorprendente es ver nuestra reacción. Simplemente nos enfadamos, lo discutimos con nuestros amigos y familiares y nos dedicamos a ver como pasa reforma tras reforma, aniquilando las cosas que más o menos protegían nuestra dignidad como ciudadanos. Bueno se me olvidaba el tema 15M, las manifestaciones, huelgas y demás. Por que digo que se me olvidaba? Por que creo que han perdido la legitimidad que poseían. Desde mi punto de vista, este tipo de protestas son útiles cuando lo que se quiere cambiar es algo más sencillo que lo que ocurre en la actualidad. Si lo que queremos es cambiar el sistema actual, o por lo menos modificarlo un poco, no podemos pretender que con simplemente salir a la calle todo estará hecho. Se que muchos diréis "Mejor que quedarse en casa sentado...". Estoy completamente de acuerdo con eso, pero necesitamos buscar otras formas más efectivas de cambiar las cosas y de que se le haga caso al ciudadano.
La más sencilla me parece votar, pero visto lo visto,somos muy tercos y votamos siempre a los mismos. Ayer discutiendo con mi padre, me decía que han engañado mucho en campaña. No digo que esto no haya sido así, pero de sobra sabíamos la que se nos venía encima. Con el norte de Europa apretando cada vez más no hacía falta ser muy inteligente para suponerse algo!Pero viendo esto se me plantea como un problema algo que muchos ven como una solución. He oído y leído que estaría muy bien que tuviésemos una Democracia participativa y no representativa. A simple vista me parece muy bonito, pero si tenemos una mayoría de población con derecho a voto que otorga todo el poder al Partido Popular, no entiendo como hay gente que puede defender el riesgo de dar a esa mayoría de ciudadanos, el derecho a elegir las decisiones del país. Y de los ciudadanos.
Resulta complicado saber cual sería el modo más sencillo de dirigirnos al cambio. Aunque sinceramente sencillo no creo que exista ninguno. Es para mi precisamente este el problema de nuestra sociedad y en particular de las nuevas generaciones. La gran mayoría de gente joven no ha tenido problemas para conseguir cosas o caprichos, siempre hemos tenido esa facilidad o ventaja. Lo preocupante es que cambiar el sistema no es un capricho, es una necesidad, está en juego el futuro, pero esto no es sencillo de modificar. Requiere, desde mi punto de vista, un sacrificio que pocos están dispuestos a asumir y hasta que esta mentalidad siga vigente, tendremos que asumir las consecuencias de no forzar el cambio que muchos deseamos.

Mientras tanto, Palestina se desangra.

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